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Delfos es un lugar arqueológico que desde 1987 fue declarado por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad y que en la antigüedad era el lugar del Oráculo de Delfos, el cual estaba dentro de un templo dedicado al dios Apolo.
En épocas antiguas los griegos reverenciaban este lugar como el centro del universo o también conocido como ónfalos.
El Oráculo de Delfos
El culto pagano fue prohibido en el año 385 d. C. por Teodosio I, el cual cerró para siempre el oráculo de Delfos, el cual era la principal fuente de ingresos de la ciudad, de manera que progresivamente esta se empobrece y en pocos años se convierte en un poblado.
¿Como se consultaba el Oráculos de Delfos?
Para consultar el Oráculos de Delfos había que trasladarse hasta al templo dedicado a Apolo, considerado uno de los centros religiosos más importantes de la época, en donde se ofrecía una tarta de miel y el sacrificio de una cabra a Apolo, la cual era quemada en una hoguera rociándola con agua.
Consejos para visitar el Oráculos de Delfos
- Es importante saber que el yacimiento arqueológico de Delfos y el Oráculos de Delfos no están ubicados en el mismo lugar, existe una distancia de 500 metros entre ellos, de manera que hay que salir de un lugar para acceder al otro.
- Lo ideal es visitar el yacimiento, luego el museo y por último el Oráculo de Delfos.
- Se recomienda a los visitantes que van en coche, dejarlo en el parking habilitado al lado del museo.
- El precio de la entrada a Delfos incluye la entrada a la antigua Delfos, el museo y el Oráculos de Delfos.
- El horario es de 08:00 horas hasta las 20:00 horas.
Qué ver en Delfos
En la actualidad, Delfos es uno de los yacimientos arqueológicos con más relevancia en el mundo, en donde todos los años miles de personas viajan a este lugar en donde los restos los transportan a un pasado imponente.
Es un lugar emblemático con vistas sorprendentes del mar y el valle, además que este pequeño pueblo tiene la gran ventaja de que la mayor parte de los hoteles y bares cuentan con miradores que sorprenden.
Este es un lugar con un entorno natural que cuenta con fascinantes tiendas rodeado de árboles y mucha vegetación, lo que hace que el viaje a Delfos merezca la pena. Hay lugares que no pueden dejar de visitarse:
- El Museo Arqueológico de Delfos: en donde se encuentran restos del antiguo santuario como estatuas, figuras, vasijas o artesanía elaborada con metales preciosos.
- Existen dos edificios que a pesar de estar en un estado degradado muestran el nivel de grandeza que alcanzó ese lugar; el primero de ellos es el Templo de Apolo, con columnas monumentales que destacan el centro del santuario y el otro es El Teatro, en donde se realizaban concurso de Lírica y obras dramáticas.
- Es posible observar los restos de la Fuente Kastalia, lugar a donde los adoradores de Apolo y los mensajeros de toda la antigua Grecia acudía para purificarse y consultar al Oráculo de Delfos en busca de ayuda cuando se tienen que tomar decisiones importantes.
- Se puede disfrutar de un templo de planta circular conocido como Tholos, el cual está rodeado de una columnata y cuyos orígenes se remontan al año 380 a. C., la cual representa una de las imágenes más conocidas de Delfos.
Las ruinas de Delfos
Delfos está situado a 260 kilómetros de Atenas, en donde se encontraba en centro religioso del mundo griego en el siglo VI a. C. y es una de las ruinas que mejor se conservan.
El recorrido desde Atenas hasta Delfos es bastante peculiar, con mucho verde en invierno y montañas llenas de nieve; al llegar al lugar la visita comienza por el antiguo mercado romano por la Vía Sacra, la cual conduce a unos pequeños templos llamados «Tesoros», los cuales eran una ofrenda a los peregrinos de diferentes ciudades.
Este recorrido se lleva a cabo por una serie de cuestas, construidas en zig zag y que llega al Templo de Apolo en donde solo quedan una base y algunas columnas.
Más adelante está el Teatro De Delfos, con impresionantes vistas y el cual tenía una capacidad de 5000 personas.
El recorrido por la zona de los templos termina en el Estadio, con paredes de roca caliza y rodeado de pinos, en donde se realizaban distintos actos deportivos.
La visita a Delfos termina en el museo que consta de 14 salas divididas en 2 plantas, compuesto por muchas piezas que han sido extraídas de excavaciones que se han realizado en el lugar.
Como llegar a Delfos
Desde Atenas existe una distancia de unos 200 kilómetros hasta Delfos, por lo que muchas personas optan por alquilar un coche con la facilidad de combinar la visita con Meteora o el Monasterio de Osiou Louka;
Otras prefieren tomar un autobús que sale desde el Terminal B de Atenas y en diferentes horarios, que son: 07:30 horas, 10:30 horas, 14:30 horas y 18:15 horas. Este es un trayecto que tarda unas tres horas, por lo que se recomienda viajar en el primer autobús y hacer reservaciones de billetes con antelación.
¿Donde alojarse en Delfos?
Hay diferentes opciones para alojarse en Delfos, pero muchos recomiendan la parte más alta de la ciudad para poder disfrutar de las mejores vistas hacia el valle que llega a la Bahía de Itea, en el Golfo de Corinto.
Uno de los mejores hoteles de la ciudad, es el Airon Hotel, con habitaciones que cuentan con una terraza en donde se disfrutan grandes vistas al valle, se recomienda confirmar disponibilidad para hacer las reservaciones con antelación.
Su dueño, el mismo del restaurante que está junto a la parada de autobuses, ofrece la oportunidad de subir a los turistas en coche desde el restaurante hasta el hotel, además que ofrece buenos consejos sobre el lugar.
Gastronomía de Delfos
La gastronomía de Grecia se destaca por tener sabores únicos y en donde al igual que la mayoría de las cocinas ha sido influenciada por los países vecinos.
Su cocina tradicional se destaca por elaborarse con ingredientes característicos de la dieta mediterránea al igual que especias y hierbas aromáticas y en donde el ingrediente principal es el aceite de oliva de origen griego.
Entre los platos típicos se destacan:
- Fava: un rico puré de guisantes.
- Keftedes: espectaculares albóndigas fritas con orégano y menta.
- Mezze: una selección de aperitivos variados que se sirven junto con el ouzo.
- Ouzo: es un licor dulce y con olor a regaliz y que suele tener entre 37 y 50 grados de alcohol.
- Souvlaki: es una brocheta a la plancha que puede ser de carne de pollo, cerdo, pescado, cordero o camarones.
Historia de Delfos
Según la mitología griega, Delfos perteneció a muchos dioses antes que Apolo hiciera posesión de ella, pero Esquilo dice que pertenece a Temis y Gea; pero Pausanias afirma que fue un oráculo de Poseidón y de Gea, la cual dio su parte a Temis y está a su vez a Apolo, el cual más tarde obtuvo la parte de Poseidón a cambio de la isla de Calauria.
La población de Delfos era en gran parte de Licorea y se supone que fue una ciudad que se diferenciaba de las demás por su idioma y tradición en donde en la actualidad se encuentra Liakura. Tenían un gobierno que estaba en manos de familias nobles.
Estos nobles después de algún tiempo comenzaron a escoger magistrados entre los cuales se elegía el rey, que más tarde fue llamado Pritano; era un gobierno teocrático, en donde el templo y su dios dominaban en gran manera la tierra que era cultivada por los esclavos del mismo templo, inclusive hasta los sacerdotes recibían regalos de reyes de otras ciudades y hombres ricos que iban al oráculo y ofrecían sacrificios.
En el año 548 a. C. el fuego abrasó el templo, el cual quedó totalmente destruido, pero, más tarde por orden del Consejo anfictiónico se decide su reconstrucción, con la expectativa de que fuera más grande y magnificente con un presupuesto de 300 talentos, en donde una parte sería costeada por la ciudad de Delfos y la otra la debían pagar otras ciudades y reinos, es una obra que se ejecutó a cargo de la familia ateniense de los Alcmeónidas, que ara ese entonces vivían en el exilio.
En 480 a. C. Delfos fue invadida por los persas por lo que sus ciudadanos huyeron al monte y solo seis se quedaron para defender el templo y evitando que los tesoros fueran movidos. La historia menciona que, cuando los persas avanzaron hacia la ciudad, un gran trueno se sintió y cayeron piedras de la montaña que aplastaron a muchos de estos, razón que hizo que el resto huyera de pánico y fueran perseguidos por guerreros a los cuales se les considero héroes Filacos y Autonoos.
Las grandes riquezas que se atesoraban en el templo, fue motivo para una lucha, la cual desencadenó una serie de conflictos llamados «Guerras Sagradas«, entre focidios y anfictionicos (entre los años 590 a. C. al 338 a. C.) que querían tener el control y en donde diferentes ciudades y reinos se inclinaban a uno u otro bando.
En 279 a. C. Delfos fue atacada nuevamente, pero esta vez por los gálatas, bajo la dirección de Breno, el cual se sentía tentado por las riquezas que supuestamente existían en el templo, pero al igual que los persas fue rechazado de manera sobrenatural, con grandes rocas que cayeron desde las montañas.
A mediados del siglo I, Delfos sufrió un importante saqueo en manos de Nerón, quien se llevó 500 estatuas de bronce, la cuales repartió entre sus soldados y abolió el oráculo, sin embargo esto no impidió que volviera a tener renombre y esplendor ya que, más tarde Adriano (Emperador romano) lo restauro.